MSc. Francesca Protti Sánchez

Nuestra Ticotal, la MSc. Francesca Protti Sánchez, es el Talento Destacado del mes de setiembre 2022.

Francesca desde pequeña tuvo interés y afinidad por las Ciencias Naturales, motivada también por su familia que le inculcó esa fascinación.

Realizó su bachillerato en Biología con énfasis en Biología Tropical en la Universidad Nacional (UNA). Posteriormente obtuvo su maestría en Biología en la Universidad de Costa Rica (UCR) donde trabajó con una especie de rana venenosa, Phyllobates vittatus (Dendrobatidae), que únicamente se encuentra en el Pacífico Sur de Costa Rica, investigando sobre la relación entre la coloración y la toxicidad de dicha rana y la evasión de depredadores.

Durante sus estudios universitarios contó con varias oportunidades para salir del país, las cuales fueron posibles gracias al apoyo de las Universidades públicas, específicamente la UNA y la UCR, tanto por la educación de gran calidad que recibió, así como por el apoyo financiero. Dichas salidas académicas al extranjero, incluyendo asistencia a conferencias, pasantías y cursos, fueron determinantes en su formación como científica. Estas experiencias también la motivaron a realizar un doctorado fuera de Costa Rica.

Desde enero del 2020 Francesca se encuentra en el Instituto Max Planck de Ecología Química obteniendo su doctorado en un proyecto en conjunto con la Universidad de Trento, en Rovereto, Italia, donde investiga el efecto de las señales de advertencia de presas aposemáticas sobre el cerebro de los depredadores. Además, desde el 2021 realiza una investigación en conjunto con la UCR, en la que estudia la ecología química y comportamiento de las ranas venenosas de Costa Rica.

 

 

1.    ¿Cuáles en su caso fueron los determinantes y/o oportunidades para salir del país?

Durante mis estudios universitarios tuve varias oportunidades para salir del país, las cuales fueron posibles gracias al apoyo principal de las Universidades públicas, específicamente la Universidad Nacional (UNA) y la Universidad de Costa Rica (UCR), tanto por la educación de gran calidad que recibí, así como por el apoyo financiero. Estas salidas académicas al extranjero, incluyendo asistencia a conferencias, pasantías y cursos, han sido determinantes en mi formación como científica, ya que me permitieron aprender muchísimo y a la vez conocer personas que hoy son colaboradores y mentores para mí. Estas experiencias en el extranjero también fueron lo que me motivó a hacer un doctorado afuera de Costa Rica.

Cuando estaba finalizando mi Maestría en la UCR en el 2019, y estaba en búsqueda de opciones de doctorado en el extranjero, encontré que había un llamado para un proceso de reclutamiento en el Instituto Max Planck de Ecología Química (MPI-CE) en Alemania para proyectos de doctorado. Entre los proyectos que estaban en concurso para la posición de doctorado, había uno que se ajustaba totalmente con mis intereses y que podía ser una buena continuación a mi proyecto de Maestría. La posición de doctorado era financiada por un International Max Planck Research School (IMPRS), y el proyecto en sí ya tenía financiamiento disponible, condiciones que consideraba esenciales para hacer un doctorado, por lo que decidí aplicar. En un primer proceso de selección, después de cumplir con todos los requisitos para la aplicación, realicé una entrevista online con los investigadores principales de este proyecto, quienes hoy son mis supervisores del doctorado. Después de esta entrevista fui invitada a Alemania a participar de un proceso de reclutamiento, donde tuve que ir a varias entrevistas y dar una presentación sobre mi experiencia académica ante todo el Instituto. Para este proceso de reclutamiento, habían elegido 15 personas de varios países para competir por cinco posiciones de doctorado. Después del proceso de selección, tuve la dicha de ser una de estas cinco personas elegidas para realizar un doctorado en este Instituto. Entonces, desde enero del 2020 estoy haciendo mi doctorado en un proyecto en conjunto entre el MPI-CE y la Universidad de Trento, en Rovereto, Italia.

 

 

2.    En términos generales, ¿cómo describiría sus condiciones de vida en el exterior (p.ej. jornada de estudio y/o trabajo, se han cumplido sus expectativas de lo que sería desenvolverse profesionalmente en el extranjero, principales obstáculos que se le han presentado)

Para mi doctorado he tenido la oportunidad de vivir en Alemania e Italia. Definitivamente la pandemia fue uno de los mayores desafíos, ya que justo cuando debía ir a Italia a iniciar mis experimentos, fue cuando Italia estuvo más golpeada por la pandemia, por lo cual no pude iniciarlos según había planeado. Además, llegué a Alemania en enero 2020, por lo que tuve menos de tres meses de “vida normal” previo a la pandemia. De igual manera fue una gran carga emocional estar en otro país, sola, sobre todo durante los primeros meses que había tanta incertidumbre, lo cual también acentuaba la preocupación que tenía por mi familia y lo que estaba sucediendo en Costa Rica.

Fuera del tema de pandemia, hay otros desafíos que he tenido que superar. Por ejemplo, el idioma ha sido una gran barrera para mí en Alemania ya que no hablo Alemán, lo cual hace las cosas básicas un poco más difíciles. Sin embargo, estoy en proceso de aprenderlo. También, hago experimentos de comportamiento con animales, lo cual implica jornadas muy extensas de experimentación, que resultan bastante cansadas y requieren mucha paciencia. Sin embargo, es justo mencionar que estos desafíos los he ido superando gracias al apoyo de buenos supervisores, compañeros de laboratorio y amigos, así como el tener ratos de esparcimiento para conocer y disfrutar la cultura local. Por supuesto, también mi familia, a la distancia, ha sido un gran apoyo para mí en todo momento.

 

3.    ¿Qué tipo e intensidad de contacto profesional mantiene con CR?

Actualmente tengo un proyecto financiado por el Consejo Nacional de Rectores (CONARE) y la Sociedad Max Planck, el cual es en conjunto con colaboradores del Instituto Clodomiro Picado (ICP) y la Escuela de Biología de la UCR, en el cual estamos estudiando la ecología química y comportamiento anti depredadores de las ranitas venenosas de Costa Rica. Este proyecto tuvo trabajo de campo en Sarapiquí y en la península de Osa y tendrá trabajo de laboratorio en el ICP. Además, con este proyecto tenemos un estudiante de la UCR haciendo su tesis de Maestría, así como estudiantes asistentes apoyándonos con el trabajo de campo.

Este proyecto me ha permitido tener un contacto muy cercano con la Universidad de Costa Rica y ha establecido a la vez un puente de cooperación académica entre la UCR y el MPI-CE.

 

4.     Recomendaciones de iniciativas que apoyen que el talento en el extranjero actúe como agentes del  desarrollo en Ciencia y Tecnología.

La embajada de Costa Rica en Alemania recientemente fomentó la formación de la “Red de Investigadores y Científicos Costarricenses en Alemania (RICCA)” para promover la cooperación académica y científica entre Costa Rica y Alemania.

 

5.    ¿Estaría dispuesto(a) a regresar al país si se presentan las posibilidades idóneas?

Definitivamente. Costa Rica, con su nivel de biodiversidad y la cantidad de ecosistemas, es un paraíso para la investigación en biología. Además, en Costa Rica tenemos un gran talento humano. Esto ha sido especialmente notorio para mi ahora que vivo en el extranjero, porque es realmente impresionante, y a la vez un orgullo, notar la calidad de profesionales que son formados en nuestras Universidades. Por estas razones es que para mí sería un gran privilegio poder regresar a Costa Rica y realizar investigación en el país. Por otro lado, la educación pública costarricense ha hecho una gran inversión en mí durante toda mi formación académica, por lo que me encantaría poder volver y devolver al sistema un poquito de lo que yo he ganado, en términos de investigación, conocimiento y mentoría para futuras generaciones.

 

6.    ¿Cuáles incentivos considera pertinentes para retener al talento científico en el país?

Una de las grandes limitaciones que tenemos en Costa Rica para realizar investigación es el acceso a fondos y salarios competitivos. Esto provoca que para muchas personas a veces sea una mejor opción quedarse en el extranjero. Además, necesitamos más apoyo administrativo en términos de facilitación de trámites. Mi experiencia en esto ha sido que prácticamente hay que batallar con la burocracia relacionada a la obtención de permisos y uso de fondos, lo cual es bastante desmotivante.

 

7.    En su área de trabajo, ¿cuáles serían las necesidades de desarrollo del área en CR?

Costa Rica tiene muchísimo potencial para la investigación en diversas áreas de la ciencia. De nuevo, necesitamos más acceso a fondos para investigación en ciencias básicas y facilitación de trámites.

Considero que se debe promover la investigación interdisciplinaria porque la ciencia se beneficia de la diversidad, en todos sus sentidos. También necesitamos más apoyo para las mujeres y tratar de cerrar esa brecha de género que existe en las carreras STEM.

 

8.    ¿Desearía plasmar algún comentario adicional?

Quisiera agradecer a la red Ticotal por tomarme en cuenta. Creo que están haciendo una gran labor en visibilizar la labor de investigadores ticos en el extranjero. Admiro a muchas personas que han pasado por el proceso de realizar posgrados en el extranjero y a través de esta iniciativa nos acercamos más, y a la vez permite que las personas que leen estos perfiles también se vean reflejados y vean que se puede seguir adelante.

Este tipo de iniciativas, por ejemplo, me parecen bastante significativas para la creación de modelos a seguir en la ciencia. En mi caso, he tenido la dicha de tener excelentes mentores y modelos a seguir. Al ver mujeres científicas, desempeñándose exitosamente en las áreas de interés que tengo, ha sido valioso para darme cuenta que algún día yo podría ser como ellas y es algo que siempre me motiva a seguir adelante. Por esta razón es que también necesitamos más apoyo para que las niñas se interesen por carreras STEM.

Finalmente, quiero aprovechar esta oportunidad para agradecer a los mentores que he tenido a lo largo de mi formación académica, tanto durante mi bachillerato en la Universidad Nacional como durante mi maestría en la UCR. De igual manera, el apoyo que he recibido de mi familia ha sido fundamental para mi desarrollo como científica y es gracias a ellos que he podido llegar donde estoy hoy.