Carlos L. Araya Pereira, Ph.D.
Nuestro Ticotal el Dr. Carlos L. Araya Pereira, es el talento destacado del mes de marzo del 2015. El Dr. Araya realizó estudios doctorales en la Universidad de Washington (Seattle, Washington), donde desarrolló tecnologías para el estudio paralelo de colecciones masivas (105-106) de proteínas. Actualmente realiza su postdoctorado en la Universidad Stanford (Palo Alto, California), donde aparte de liderar estudios de investigación en regulación genómica, ha desarrollado una nueva serie de tecnologías bioquímicas de alta procesividad, y nuevas tecnologías de análisis e identificación de mutaciones causantes de cáncer.
1. ¿Cuáles en su caso fueron los determinantes y/o oportunidades para salir del país?
Luego de mis primeros dos años en el programa de Ingeniería en Biotecnología del ITCR, determiné que mis intereses principales eran el desarrollo de tecnologías moleculares y genómicas. Reconociendo que la vanguardia del desarrollo de las mismas tecnologías estaba concentrada en Estados Unidos comencé a aplicar a distintas universidades. Junto con otros dos compañeros de Ingeniería en Biotecnología del ITCR, buscamos programas de estudio en genética y biología molecular que reconocieran nuestros primeros dos años de cursos. Al final, dos de nosotros viajamos a Washington State University (W.S.U.), donde –en el transcurso de dos años– ambos completamos grados en con dos énfasis: Genética y Biología Celular, y Biotecnología.
Económicamente, fue mi familia que hizo posible el inicio de mis estudios en el exterior. Por mis conocimientos e interés en biología y ciencias de la computación, estando allá obtuve dos becas de apoyo en W.S.U. luego un trabajo como asistente de investigación, y finalmente una beca completa de la Universidad de Washington en Seattle para realizar la investigación y estudios de doctorado en el Departamento de Ciencias Genómicas.
2. En términos generales, ¿cómo describiría sus condiciones de vida en el exterior (p.ej. jornada de estudio y/o trabajo, se han cumplido sus expectativas de lo que sería desenvolverse profesionalmente en el extranjero, principales obstáculos que se le han presentado)
Puedo decir, con total sinceridad, que estudiar y realizar investigación en el exterior me ha abierto el mundo, tanto geográfica, cultural, y profesionalmente. La mayoría de las personas que no han vivido en E.E.U.U. no aprecian la diversidad cultural dentro de un país que representa un sitio de confluencia de numerosas culturas e intereses. He tenido la suerte de trabajar junto a, y desarrollar valiosas amistades con, jóvenes de diversos intereses científicos, en diferentes fases de sus carreras, y de distintos orígenes, incluyendo Turquía, Brasil, Hungría, India, China, Japón, Alemania, Francia, México, y E.E.U.U. entre otros. En esta confluencia cultural encontré a mi esposa, y hoy en día disfrutamos un ambiente en casa que profundiza elementos de nuestras culturas de origen (Brasil y Costa Rica), con elementos de los países donde hemos vivido (E.E.U.U., Noruega, y Bélgica).
E.E.U.U. tiene una cultura laboral fuerte, un énfasis en entrepreneurismo e independencia, y una economía diversificada. En mi opinión, estos son factores que favorecen el desarrollo profesional e individual. Los salarios de investigación académica –ya sean de doctorado, postdoctorado, o investigador independiente– por supuesto no son salarios espléndidos, pero permiten una calidad de vida razonable. He tenido la suerte de trabajar enfocado exclusivamente en áreas de mi interés, viviendo en regiones con montañas y costas espectaculares (¡aunque me falta la biodiversidad de nuestro país!).
3. ¿Qué tipo e intensidad de contacto profesional mantiene con CR?
Desafortunadamente, mi investigación ha estado fuertemente concentrada en equipos dentro de E.E.U.U. No obstante, hoy día tengo la esperanza que algunas de las tecnologías que hemos desarrollado recientemente encuentren aplicaciones y colaboraciones en Costa Rica y Brasil.
4. Recomendaciones de iniciativas que apoyen que el talento en el extranjero actúe como agentes del desarrollo en Ciencia y Tecnología.
A mi parecer, necesitamos mecanismos de investigación y colaboración que permiten a los muchos talentosos estudiantes de Costa Rica movilizarse de libros, a ciclos intercalados de preparación teórica, práctica, y análisis. Para ello es importante aumentar el intercambio profesional entre investigadores en Costa Rica y el exterior con el objetivo de definir y avanzar áreas de interés común. Como un primer paso, recomendaría atraer conferencias importantes existentes y nuevas conferencias en diferentes áreas científicas a ser organizadas en Costa Rica. En el área de biología por ejemplo, hay un sin número de posibles colaboraciones y conferencias que podrían desenvolverse alrededor de temas de integración de métodos genómicos con el análisis de biodiversidad, ecología, bioprospección, desarrollo urbano, y el estudio de dolencias tropicales que impactan desproporcionadamente altos porcentajes de la población mundial.
5. ¿Estaría dispuesto(a) a regresar al país si se presentan las posibilidades idóneas?
Con certeza. Nos mantenemos abiertos a oportunidades importantes para avanzar la ciencia, biología, y salud en América Latina.
6. ¿Cuáles incentivos considera pertinentes para retener al talento científico en el país?
Además de retenerlo, el énfasis debería ser crear más talento científico en Costa Rica. Para ello necesitamos cambios, e intercambios, culturales y sociales importantes, acciones que motiven a más costarricenses a perseguir carreras en ciencia y tecnología. Necesitamos una conciencia social costarricense que reconozca que la ciencia y tecnología son pilares fundamentales del desarrollo económico, cultural, y ambiental de nuestra sociedad, y que como tal deberían ser el foco de inversiones económicas y políticas. Este es un objetivo urgente y perpetuo.
En términos específicos, de la misma forma que la industria de informática en Costa Rica fue propulsionada por políticas de excepción de impuestos de importación para hardware y software, políticas de excepción de impuestos de importación de equipo y reactivos científicos promoverán la construcción de un ecosistema de diversos desarrollos científicos e industrias tecnológicas. Similarmente, necesitamos reformar aspectos del sistema educativo que confunden memorización con comprensión, para dar énfasis a principios fundamentales y cuantitativos.
Fortaleciendo la infraestructura y formación científica local, y promoviendo interacciones con equipos científicos y tecnológicos en el exterior –a través de colaboraciones, seminarios, y pasantías como ha sido sugerido por otros entrevistados en este formato– podríamos posicionar a Costa Rica como un atractivo centro de colaboración y desarrollo científico en problemas importantes en la intersección de ecología, medicina, computación, y biotecnología entre otras ramas de ciencia. Los estadounidenses tienen una expresión que me ha fascinado: “If you build it, they will come.” Creo que si nos enfocamos en fortalecer la base científica local, nos será más fácil atraer los recursos y colaboraciones necesarios para maximizar la actividad científica y tecnológica en Costa Rica.
7. En su área de trabajo, ¿cuáles serían las necesidades de desarrollo del área en CR?
Durante la última década, la eficiencia de tecnologías de secuenciamiento de ADN –medida como el costo por secuenciación de cada base– se ha duplicado anualmente. En cuanto en el 2001 costaba cerca de tres mil millones de dólares obtener la secuencia de un genoma humano, hoy, lo mismo tiene un costo aproximado de mil dólares. Por ejemplo, a los ingenieros en computación les gusta hablar de la erróneamente llamada Ley de Moore (que en realidad es una observación, no una ley) como ejemplo de la tasa de avance tecnológico. Dicha observación se refiere a la tasa de avances en procesadores, cuya densidad de circuitos (y aproximada capacidad computacional) se ha duplicado más o menos cada 18 meses por más de 40 años. Sin embargo, los avances en el secuenciamiento de ADN son aproximadamente un 50% más rápidos. Dichas plataformas tecnológicas integran avances en biología molecular, enzimología, física óptica, nanomanufactura, y computación, para secuenciar >109 moléculas de ADN en paralelo. Dichos avances son el corazón de la llamada revolución genómica. También hoy sabemos que en general los desarrollos en algoritmos genera avances que van más rápido que la citada observación de Moore.
Para participar y contribuir al avance de las ciencias genómicas, Costa Rica debería invertir en la construcción de ecosistemas que integren el análisis genómico, considerando en lo particular inversiones en infraestructura genómica y bioinformática, con nuestros recursos naturales y emprendedurismo. Similarmente, Costa Rica debería aprovechar su riqueza en biodiversidad para liderar el (1) estudio y aprovechamiento de ecosistemas naturales, (2) el desarrollo de métodos y tecnologías de bioprospección, y (3) el desarrollo y comercialización de agentes moleculares.
8. ¿Desearía plasmar algún comentario adicional?
Quisiera tomar esta oportunidad para recalcar a los jóvenes costarricenses lo que tenemos en plena vista. El mundo enfrenta actualmente problemas importantes en la prevalencia de dolencias humana sin tratamientos, continuas epidemias emergentes y recurrentes, resistencia a antibióticos y tratamientos oncológicos, colapsos ecológicos con consecuencias catastróficas en sistemas genéticos y funciones ambientales, déficits de energía y agua, ineficiencias en los sistemas de producción y distribución de alimentos, patrones de contaminación y alteraciones climatológicas globales. Resolver estas amenazas depende no solo de inversiones significativas y conocimiento técnico, pero críticamente también del ingenio y creatividad que caracteriza a los costarricenses. Los jóvenes de Costa Rica, con su ejemplar determinación y creatividad, comparten la responsabilidad de contribuir a superar los retos que la vida en este planeta enfrenta.
Finalmente, agradezco a la ANC y TICOTAL el honor del reconocimiento y principalmente su esfuerzos por avanzar la ciencia y tecnología en Costa Rica.