Felipe Mora Bermúdez, Ph.D.

Felipe Mora, Ph.D.

Nuestro Ticotal el Dr. Felipe Mora, es el talento destacado del mes de julio del 2015. El Dr. Mora actualmente  se encuentra laborando como Investigador Posdoctoral, en el Instituto Max Planck en Alemania. Sus investigaciones se basan en  la regulación de la división celular en el desarrollo del cerebro. Específicamente, investiga como ciertas células madre del neuroepitelio modifican su modo de división para dar origen a las células cerebrales durante el desarrollo embrionario. 

Sus publicaciones e investigaciones han sido de gran relevancia para la ciencia, el Dr. Mora fue galardonado con el Premio Nacional de Ciencia Clodomiro Picado Twight 2007.

 

1.   ¿Cuáles en su caso fueron los determinantes y/o oportunidades para salir del país?

Desde temprano en mi carrera había querido realizar un posgrado y un doctorado, ya que son pasos importantes para una carrera en investigación en biología, que siempre ha sido mi vocación. Además, comprendí de que las posibilidades y medios para hacerlo en Costa Rica eran limitados. No obstante, después de graduarme en biología en la UCR, continué con la Maestría en Genética Humana, de la cual completé todos los cursos y di los primeros pasos de la tesis. En esos días sucedieron dos cosas determinantes. Primero, las respuestas a mis solicitudes de financiamiento para la tesis eran, por decirlo de manera cariñosa, poco ventajosas, sobre todo considerando que era un proyecto que requería un mínimo sustancial de reactivos y materiales. Segundo, descubrí excelentes oportunidades de maestría en Europa, en biología celular y molecular. Recordé entonces que, al escribir mi anteproyecto de tesis, lo que más me había entusiasmado sobre ciertos genes y regiones genómicas, más que su localización y patrones de herencia, habían sido los mecanismos moleculares en los que podrían participar. La decisión de irme, a fin de cuentas, fue expedita, sobre todo cuando mi opción preferida, la Universidad de Heidelberg, me aceptó en su Maestría Internacional sin hacer entrevista. El apoyo de mi familia fue también determinante, así como una modesta beca que pude conseguir en Heidelberg.

2.   En términos generales, ¿cómo describiría sus condiciones de vida en el exterior (p.ej. jornada de estudio y/o trabajo, se han cumplido sus expectativas de lo que sería desenvolverse profesionalmente en el extranjero, principales obstáculos que se le han presentado)?

Actualmente me siento bien adaptado a la vida en Alemania y a la vida de investigación que, como todo, tiene sus idiosincrasias. Estoy a gusto donde vivo y ya pienso en el siguiente paso profesional. El idioma de estudio y de trabajo ha sido el inglés, así que por ese lado no hubo dificultad. Sin embrago, aprendí alemán lo más rápido que pude, para poder disfrutar más la vida y la comunidad local. Al principio el alemán es un idioma muy retador, pero ahora lo disfruto. No me puedo imaginar vivir en un país y no conocer relativamente bien la lengua local.

El trabajo en el laboratorio es intenso, de jornadas largas, a menudo con fines de semana, pero es muy interesante y he podido desarrollar mis ideas con mucha independencia, apoyo de mis jefes y con excelentes condiciones para la investigación en biología fundamental. En los institutos en que he trabajado, como el EMBL y el MPI-CBG, no quedan muchas excusas para no realizar ciencia de primer nivel.

3.   ¿Qué tipo e intensidad de contacto  profesional mantiene con CR?

En términos oficiales mantengo un contacto esporádico. Quisiera que fuera más profundo, aunque mis áreas de investigación traslapan poco con lo que se hace en el país. No obstante, he podido dar varias conferencias y tengo buenos amigos colegas con los cuales mantengo un contacto frecuente. Puedo así mantenerme al tanto de lo que sucede en el país y contribuir en lo que se pueda. También sigo la prensa local, y envió ocasionalmente colaboraciones para ser publicadas en columnas de opinión y divulgación, por ejemplo sobre temas como la teoría de la evolución y la fertilización in vitro.

4.    Recomendaciones de iniciativas que apoyen que el talento en el extranjero actúe como agente del desarrollo en ciencia y tecnología.

Mecanismos y redes de comunicación, como esta, son valiosos. Creo que se debe además fomentar y facilitar que más costarricenses puedan ir al extranjero a sacar maestrías y especialmente doctorados. Esto se puede lograr con más oportunidades de beca, otorgadas por excelencia académica como único criterio. Paralelamente, deben ofrecerse buenas perspectivas de trabajo en el país para que el regreso sea muy atractivo. La equiparación y reconocimiento de títulos y publicaciones científicas debe reestructurarse y agilizarse mucho y las marañas burocráticas que entorpecen mucho estos y otros procesos deben reducirse fuertemente.

5.   ¿Estaría dispuesto(a) a regresar al país si se presentan las posibilidades idóneas?

Sin duda. Vivir en Costa Rica es algo que me gusta, y cada vez que estoy de visita lo experimento de manera intensa, especialmente junto a familia y amigos. Mis temas de investigación son, sin embargo, esencialmente inexistentes en el país y su desarrollo requeriría de cambios de mentalidad y de grandes inversiones, así que por el momento me hago pocas ilusiones.

 

6.   ¿Cuáles incentivos considera pertinentes para retener al talento científico en el país?

Creo que en este tema hay dos situaciones que quizás haya que diferenciar. Una es cómo retener a gente talentosa en el país, desde la escuela hasta que se desarrollan como profesionales. La otra es como convencer a quienes se han ido para que regresen. Antes que retener talentos, creo que es muy importante que muchos profesionales costarricenses puedan formarse fuera del país, y que tengan una posibilidad real y atractiva no solo de volver, también de poner en práctica sus nuevos conocimientos, tecnologías y experiencia. Es además fundamental que quienes regresen puedan seguir el ritmo, intensidad y ética de trabajo que han aprendido, sin las trabas técnicas, burocráticas y de mentalidad que pueda haber localmente. De no ser así, se desperdicia el aporte del profesional, quien además queda frustrado. En otras palabras, es bueno repatriar talentos pero, para que sea de provecho para el país, debe facilitarse que puedan mantener y hasta desarrollar su nivel. De otra manera es más bien una pérdida neta.

Concretamente, es indispensable que haya espacios de trabajo dinámicos, bien financiados y bien remunerados, tanto estatales como privados. Costa Rica no puede seguir ateniéndose a que los lazos familiares y el amor al país compensen por plazas de trabajo escasas, mal remuneradas y sin los fondos necesarios para realizar investigación de primer nivel. Los investigadores talentosos y exitosos usualmente tienen opciones, y si las condiciones no son atractivas, resulta difícil convencerlos de que escojan regresar. Diferentes instituciones del país han querido realizar esfuerzos para mejorar este panorama, pero el trabajo que queda es muy grande.

 

7.   En su área de trabajo, ¿cuáles serían las necesidades de desarrollo del área en CR?

Mi trabajo en biología fundamental se localiza en la interfaz entre la biología celular y la neurobiología del desarrollo. La gran pregunta es ¿cómo se desarrolla el cerebro de los animales, en especial el de los mamíferos, a partir de células madre neurales embrionarias? Es un área prácticamente ausente en el país, a pesar de esfuerzos recientes, y fallidos, de empezar un muy necesario programa de biología del desarrollo en la Escuela de Biología de la UCR.

Un investigador quiere hacer precisamente eso, investigar y generar conocimiento nuevo. Es probable entonces que prefiera lugares donde las condiciones le permitan poner en práctica sus numerosos años de estudio y entrenamiento. En términos concretos, se requeriría primero de una visión clara y concisa sobre la importancia que tienen la investigación en biología celular y del desarrollo dentro de las ciencias de la vida. Además, es por supuesto necesario un plan de financiamiento acorde con los requerimientos para incrementar, instalar y mantener laboratorios para tal tipo de investigación. Son laboratorios costosos, pero producen conocimiento fundamental sobre como funcionan las células, los órganos y los sistemas, tanto en la salud como en la enfermedad. Es difícil comprender como curar una enfermedad si no comprendemos como funcionan normalmente los componentes del cuerpo. También es necesario armar una “masa crítica” de investigadores en temas cercanos y afines, que se apoyen mutuamente y colaboren en proyectos conjuntos. Se trata de crear un ambiente en el cual el todo es más que la suma de las partes. Un ejemplo que conozco es el EMBL. Está entre los tres mejores institutos del mundo en biología celular y molecular, pero tiene un tamaño y presupuesto muy inferiores al de otras grandes instituciones.

8.   ¿Desearía plasmar algún comentario adicional?

Además de tener una visión clara sobre metas de investigación y de tener suficiente financiamiento, existe al menos un pilar indispensable más para desarrollar y mantener programas de investigación de primer nivel. Se trata de reconocer la importancia de la ciencia básica, aquella que genera nuevo conocimiento fundamental, sin necesariamente generar tratamientos o tecnologías a corto plazo. No es coincidencia que los países líderes en desarrollo de tratamientos y tecnologías de punta sean también líderes en ciencia básica. En países como Alemania, los programas de investigación básica no son recortados cuando hay crisis. Más bien, a menudo se responde fortaleciéndolos. Los líderes estadistas de esas potencias han comprendido que la mejor inversión para el futuro está en el conocimiento nuevo que se genera localmente. Ese conocimiento se transforma, tarde o temprano, en mejorías en el nivel de vida de los habitantes. Para esto, la inversión privada es por supuesto muy importante, pero la inversión estatal es fundamental, porque es usualmente más fácil para un estado invertir en conocimiento nuevo, sin depender de réditos financieros a corto plazo. Quienes atacan a la investigación básica, a las universidades públicas y al papel del estado como promotor del conocimiento fundamental no han comprendido la historia y la relación entre los descubrimientos científicos fundamentales y los aplicados. Le hacen daño al futuro del país.

Quisiera agradecer de corazón a la Academia Nacional de Ciencias por generar este espacio tan interesante y por la invitación para participar.